jueves, 12 de marzo de 2009

Me niego a corresponder

Esfuerzos nulos de tu mirada por retenerme,
cautiva de tu abrazo, incondicional,
que pide mi piel.
Tu ser se alimenta con mi libido.

Mi cuerpo no te rechaza, tampoco te necesita;
pero es la sed de tu locura,
y lo irracional de tus pedidos lo que te mantiene entre mis planes:
mas perversos
mas románticos
mas sinceros.

Te idealizo.
Te rechazo.
Te engaño
pero vuelvo a perdonarte una y otra vez porque se que tu negación es temor a un corazón roto.

Yo se que no sos mi destino aunque tus pocos besos arden en mi,
como recuerdos usados por otras bocas.

Tus manos se alimentan de mis poros.
Tu lengua conoce cada palabra, cada rincón oculto de mi deseo.

Te necesito.
Te uso.
Te supero
pero vuelvo a perdonarte una y otra vez porque se que mi negación es llevar tu nombre
como un estigma en mi cuerpo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me recuerda a mis escrituras

Son muy tristes